El pádel es un juego relativamente nuevo, originario en los años ochentas, que actualmente en la región europea ha tenido un auge especial, así que en esta ocasión trataré de explicarte cómo puedes tener una buena táctica al momento de estar en el campo de pádel. Antes que nada debemos conocer el sistema de juego, para poder dominar mejor el partido y claro, sentirnos más cómodos dentro de la pista.
1. no cometer errores
A diferencia de otros deportes, como el tenis, el equipo ganador es aquel que menos errores comete, con respecto a errores defensivos. Este deporte no tiene nada que ver con que tengas los mejores golpes sobre la pista, sino con la táctica que utilices, es decir, debes elegir bien lo golpes en cada momento del juego y no arriesgar bolas innecesariamente.
2. ten presente la iluminación
La iluminación de la cancha es muy importante, ya que hay que ser muy precavido en el momento de atacar o preparar un golpe de volea.
3. condición física
Saber cómo esta nuestra condición física es indispensable, además de cuánta fuerza se le puede aplicar al golpe sin que se pierda el control de la pelota.
4. estudiar el partido
Elaborar un perfil del temperamento o actitud para prepararnos para un partido con
rivales aguerridos o complicados que gritan, discuten pelotas, con lo cual tenemos que estar
mentalizados a que nada nos debe llevar a perder la concentración y desviarnos de nuestro
objetivo, que es solamente ganar el partido y ser los que menos errores cometan en la pista.
5. saque y resto
Tenemos que tomar mucho en cuenta nuestro saque y el resto ya que estos son los dos primeros golpes de cada pareja que juega dentro de un punto de pádel. En ocasiones solo se dedican a meter la bola en los primeros golpes pero se debe dar mucha importancia a que estos primeros golpes sirvan de guía para el resto del juego y como se irá desarrollando el partido.
6. conocerse a sí mismo
Es muy importante estar consciente de cuáles son nuestros mejores tiros, es decir los más fuertes para utilizarlos en el partido, y también conocer lo más débiles y así trabajar en ellos.