Los irlandeses se caracterizan por su fuerza y deportes rudos, por lo que el Hurling no podía ser la excepción. De origen celta y practicado con gran asiduidad desde el siglo VIII se ha convertido en el deporte insigne de Irlanda.
Los irlandeses se caracterizan por su fuerza y deportes rudos, por lo que el Hurling no podía ser la excepción. De origen celta y practicado con gran asiduidad desde el siglo VIII se ha convertido en el deporte insigne de Irlanda.