El pádel es un juego similar al tenis que ha venido cogiendo mucha fuerza, sobre todo en países como España, Paraguay y México, al ser un modo divertido de pasar un buen rato entre amigos, disfrutando de hacer deporte sin tener presión y dificultades técnicas como reglamentos extensos como en el tenis.
Las pistas pádel individuales, tienen muchas características similares con las pistas para juegos de dobles, sin embargo algunas cosas cambian para ofrecer una experiencia mucho más rápida y con un derroche de adrenalina mucho mayor.
Diferencias de las pistas pádel individuales
Las pistas pádel individuales conservan la estructura y el concepto de cualquier pista para jugar este deporte, siendo las superficies del suelo variables entre grama artificial y concreto poroso, que permiten que el rebote y la velocidad de la bola no disminuya o se quede quieta por una superficie demasiado blanda, los colores permitidos son el azul, verde y el terracota, tal y como lo es tenis.
Una de las principales diferencias con las pistas dobles y las de tenis es que sus dimensiones varían un poco, siendo el largo de 20 metros como en las pistas para dobles, y 6 metros de ancho, 4 metros menos que en pistas dobles o completas. Sus paredes tan cerradas proporcionan una sensación de tubo, con lo que la adrenalina, la velocidad y la dinámica de este juego es mucho mayor que en otras pistas.
Así las pistas pádel individuales ofrecen mucha más dinámica y facilidad para correr tras la pelota y mandar al otro lado de la red (la cual conserva la altura de las pistas dobles), y conseguir vencer al rival.